Conoce el norte de Fuerteventura: Mucho más que playas
El mayor atractivo de la Isla de Fuerteventura para aquellos que todavía no la conocen son sus playas y sus paisajes. Sin embargo, Fuerteventura es mucho más que playas y por eso hoy te enseñamos qué hacer en el norte de la isla, una de las zonas más espectaculares.
La Oliva
Es uno de los municipios más grandes e importantes de Fuerteventura. En el siglo XIX, La Oliva, fue la capital de la isla hasta que en 1956 se trasladó a Puerto del Rosario. Entre sus núcleos de población destacan Corralejo y El Cotillo, dos de los pueblos más conocidos y espectaculares de la zona norte de Fuerteventura.
La cultura del municipio de La Oliva es muy interesante y en casi todos sus rincones podemos encontrar una historia fascinante que descubrir. Entre los monumentos de este municipio, la Casa de los Coroneles es una muestra de las típicas casas tradicionales Majoreras. Esta casa fue construida en el siglo XVII y es un lugar que todo viajero debería visitar.
Los cereales fueron la base de la alimentación de los primeros habitantes de Fuerteventura. La sequía del terreno propiciaba la agricultura de secano en la que los cereales eran el producto local. La Casa de la Cilla actualmente es un museo que te traslada a los graneros de la isla en el siglo XIX. Allí se encuentran las antiguas herramientas y métodos de labranza tradicionales, así como fotografías de la época.
La iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria esconde un políptico obra de Juan de Miranda Cejas, uno de los pintores canarios más importantes. La arquitectura del santuario no destaca, ya que sigue las formas de la arquitectura local majorera.
Para no perderte ninguno de los lugares que esconde La Oliva, lo mejor es que te alojes en Casa Tile. Una casa tradicional majorera ideal para los amantes de la playa y para los amantes de los cultivos y la agricultura.
El famoso pueblo de Corralejo
¿Quién no ha oído hablar de Corralejo y sus inmensas dunas? Corralejo es una de las zonas más conocidas de Fuerteventura que no deberías perderte por nada. Las dunas de Corralejo formadas por la erosión de conchas y caparazones de organismos marinos, son el escenario perfecto para que los más pequeños jueguen deslizándose por los altos montículos de origen orgánico.
Corralejo tiene mucho más que visitar. Este pequeño pueblo pesquero ha cambiado en los últimos años debido al turismo. Las pequeñas casas bajas y blancas dejaban paso a los hoteles familiares y los establecimientos de ocio y actividades acuáticas. No obstante, Corralejo continúa teniendo la esencia pesquera y puedes degustar el mejor pescado fresco de la isla.
Si visitas Corralejo, te recomendamos que te informes de los barcos que van hasta la Isla de Lobos, una de las atracciones turísticas más demandadas si vas a Fuerteventura.
Los rincones de El Cotillo
Otro de los pueblos pesqueros de Fuerteventura con más encanto es El Cotillo. Sus casas encaladas en blanco con el mar turquesa de fondo te dan la bienvenida. Es un paisaje digno de postal y nadie puede pasar desapercibido a sus encantos. Sus habitantes continúan viviendo de la pesca y por ello uno de los puntos más importantes es el puerto.
El Castillo o Torre de El Tostón es otro de los puntos de interés del pueblo pesquero. Juan de Bethancourt, conquistador de Fuerteventura, mandó construir la edificación, conocida como Rico Roque, para defender la isla de los piratas. La torre actual está construida sobre los cimientos de esta y es considerada monumento Histórico de Interés Cultural y uno de los monumentos importantes de la isla de Fuerteventura.
Con el mismo nombre también podemos encontrar a poca distancia el Faro del Tostón. Actualmente es el Museo de Pesca tradicional y en él puedes descubrir las tradiciones y costumbres majoreras más antiguas.
A pesar de que El Cotillo es una de las zonas más turísticas de Fuerteventura conserva las casas tradicionales pesqueras. Alójate en el apartamento rural Casa Marinera para disfrutar al máximo de la experiencia y conocer en primera persona como vivían los pescadores de El Cotillo.