El misterio de la playa de las palomitas: Playa de las Cotufas de Fuerteventura
El misterio de la playa de las palomitas: Playa de las Cotufas de Fuerteventura
Los paisajes de Fuerteventura dejan con la boca abierta. Sus montañas y explanadas desérticas, y como no, sus playas son un reclamo para turistas. Hay paisajes para todos los gustos, época del año y momento personal. Hoy, descubrimos una playa repleta de palomitas de maíz, o como se diría en la isla, la playa de la cotufas.
Al norte de Fuerteventura, en el municipio de La Oliva se encuentra esta insólita playa. En lugar de contar con la tradicional arena negra o blanca, la orilla está cubierta por cientos de cotufas.
En realidad, se tratan de algas calcáreas fósiles que la marea arrastra del fondo marino hasta la orilla, dejando un paisaje que atrae a numerosos turistas y curiosos. Estas formaciones blancas provienen de rodolitos, algas rojas que con el paso del tiempo acumulan carbonato cálcico.
Con el movimiento de las corrientes y mareas se redondean, llegándose a juntar unas con otras. Cuando las algas rojas mueren todo su esqueleto de calcifica en el fondo del mar. El mecer de las olas traslada estas falsas palomitas de maíz hasta la orilla.
Cuidar la naturaleza
La naturaleza es brillante y es capaz de hacer cosas tan increíbles como la playa de las Cotufas. Los turistas y residentes de Fuerteventura no quieren dejar pasar esta visita por alto e inmortalizan la playa. Las redes sociales se llenan con imágenes de este lugar que ya nadie quiere perderse.
El Ayuntamiento de La Oliva y organismos e instituciones de Fuerteventura, están llevando a cabo campañas para que estos parajes tan especiales y diferentes no se destruyan por la presencia de los humanos.
No dudes en visitar la playa de las palomitas o playa de las cotufas, pero hazlo siempre de manera responsable. Báñate, túmbate a tomar el sol, mira la puesta de sol, hazte fotos y diviértete, pero no alteres el ecosistema, no cojas nada, ya que estará allí por algún motivo.
Te gustará recomendar Fuerteventura y que los demás la vean, tal y como la viste tú. Y sobre todo, te gustará volver una y otra vez y encontrar la isla y sus playas como las encontraste en tu primera visita.