Fuerteventura: enamórate de las playas perfectas
Fuerteventura es el destino ideal para disfrutar en cualquier época del año. El sol es el fiel compañero de la isla en casi los 365 días del año. La temperatura cálida, incluso en invierno, permite disfrutar de sus largas playas de arena fina y blanca y sus aguas cristalinas. Es difícil no enamorarse de Fuerteventura en la primera visita. Hay quienes no pueden olvidarse de ella, y cada año la visitan como si de un ritual se tratase. Conoce las playas de la isla que te harán enamorarte y volver a ella una y otra vez.
Grandes Playas de Corralejo
En más de una ocasión ya hemos hablado de esta enorme playa de 9km de largo que forma parte del Parque Natural de Corralejo. Y es que este paraje no deja indiferente a nadie. Las grandes dunas de arena blanca refugian a los bañistas. Varias calas se suceden en las Grandes Playas de Corralejo, para todos los gustos. Desde calas para practicar nudismo hasta reservados para familias, o para pasar un día de playa de pareja o amigos.
Los amantes de los deportes de agua, como kitesurf o windsurf, también encontrarán en Corralejo su lugar para dejarse llevar por el aire que sopla en el Atlántico.
Playa La Concha
En el Cotillo, las familias encontrarán un conjunto de calas donde los más pequeños de la casa podrán disfrutar de un día de playa alejados de los grandes y fuertes oleajes. La Concha destaca por sus aguas tranquilas y la marea baja reina durante todo el año. Los mayores podrán descubrir los secretos del fondo marino practicando buceo.
Una vez terminada la jornada de playa, una de las mejores y más bonitas puestas de sol de Fuerteventura, te espera para enamorarte de la isla canaria.
Costa Calma
Los turistas de Fuerteventura se congregan en la playa de Costa Calma. Sin embargo, eso no significa que no quepa un alfiler, en Costa Calma hay sitio para todos. 2 kilómetros de arena blanca en la que los bañistas no pueden irse sin probar sus aguas cristalinas.
Más al sur, y conectada con Costa Calma, encontramos la Playa de Sotavento. Mismas características que su compañera, pero con la suerte de estar alejada del bullicio de la isla, por lo que la tranquilidad reina por encima de todas las cosas en esta parte de Fuerteventura.
Playa de Cofete
Un regalo para quien la visita. Alejada de todos se encuentra la Playa de Cofete, un lugar salvaje donde el fuerte viento sopla ofreciendo un oleaje enfurecido. El acceso a la playa no es fácil pero, una vez en la orilla, el esfuerzo merece la pena. El Macizo Montañoso de Jandía custodia el paraje, en el que desconectar del mundo dando un paseo es tarea obligatoria.
Dónde dormir
Tras un duro día de playa, toca estirar las piernas y descansar. Una de las mejores opciones para reponer las pilas para el resto de días son los apartamentos rurales. Muchos de ellos a pie de playa, en los que podrás desayunar con unas vistas inmejorables, mientras en viento del atlántico termina de despertarte para comenzar un nuevo día y descubrir nuevos rincones de Fuerteventura de los que enamorarse.
El alquiler de un apartamento rural te permite disfrutar de cada minuto sin prisas ni ataduras. El ritmo lo marcas tú.
Actividades que realizar
Fuerteventura es mucho más que playas. No puedes dejar la isla sin pasear por las calles de sus pueblos interiores, como Betancuria, visitar sus mercados artesanales donde encontrarás alguna que otra joya o practicando agroturismo.
En la isla majorera reina lo natural, y todo lo que te encuentres a tu pase es obra de la naturaleza y el paso del tiempo. En Verdeaurora Bio Farm, puedes experimentar algo distinto. Déjate llevar por los olivos, plantaciones de aloe vera y el pasado de Fuerteventura. Aprende a cultivar aloe vera, una de las plantas estrella de la isla. Conoce una nueva forma de vida donde los productos ecológicos y lo natural es el motor que te hará vivir una experiencia que te hará amar Fuerteventura y volver una y otra vez.
